La pareja de Ali Antonio Tineo Mata (27), el ciudadano que fue acribillado en la calle Pérez Aranibar de Sachaca, fue una de las últimas personas en enterarse de su muerte. Ellos convivían hace 7 años en Arequipa y Ali se dedicaba a realizar taxi según la versión de su conviviente.
«Salió a las 6 de la noche (lunes) dicendo que iba a trabajar en el taxi alquilado y hoy en la mañana (martes) empecé a recibir mensajes de mis amistades que me preguntaron si había visto las noticias el redes. También me llamó el dueño del auto y pues confirmé que la víctima era el», dijo la mujer en la morgue, luego de reconocer a Ali por su tatuaje y prendas.
Otro detalle que brindó la extranjera, es que ella no conocía a su compatriota Niurka Astudillo Mejías, la mujer con quién estaba al momento de ser asesinado por sicarios que llegaron en moto y que también mataron a la acompañante. Aparentemente las víctimas estaban bebiendo licor en el auto cuando fueron emboscados.
Finalmente, ella también señaló que Ali Antonio no había recibido alguna amenaza previa y por eso desconocía si era víctima de extorsión o algún ajuste de cuentas. Tampoco sabía que la víctima tenía dos celulares.
¿’Guerra’ de mafias?
Según fuentes de la Policía y anónimos que este medio recibió tras el crimen. Este nuevo caso de sicariato es a consecuencia de una guerra declarada entre la mafia conocida como Los Gallegos y los Orientales. Ambas organizaciones criminales estarían ‘matándose’ entre ellos por dominar la venta de drogas, prostitución y cupos.
Las autoridades tienen la información que Ali Antonio, fue señalado como autor del robo de motos, y que sería muy cercano a un sujeto conocido como «maracucho», este último sería una persona peligrosa y que tendría protección por parte de alto mandos policiales que incluso tienen nexos en la Divincri.
A raíz de este dato la pregunta a la inoperancia de la Policía en desarticular estás mafias que han sembrado el terror en Arequipa, tendría su respuesta. Ellos no están solos, tienen contactos y hasta protección por parte de las autoridades que deberían combatirlos.
Han pasado más de 4 años desde cuándo empezaron los sicariatos por parte de Los Gallegos en Arequipa, y hasta la fecha la Policía no ha podido dar con los sicarios. Prácticamente ellos dominan la ciudad, mientras las extorsiones y crímenes pasan frente a los ojos de la Policía y demás autoridades.
