Paucarpata vuelve a ser escenario de un brutal ataque de sicariato. La tranquilidad de una fiesta en honor a la Virgen de Copacabana se vio interrumpida cuando tres encapuchados abrieron fuego en busca de un tal «Jesuko», sembrando el caos y el miedo entre los asistentes.
La calle Alfonso Ugarte, en el distrito de Paucarpata, fue testigo de una escena aterradora. Lo que debía ser una celebración en honor a la Virgen de Copacabana, con música chicha y una agrupación musical en vivo, se convirtió en una pesadilla cuando tres sicarios llegaron a bordo de una motocicleta. Los atacantes, encapuchados, comenzaron a disparar indiscriminadamente tras no encontrar a su objetivo, un individuo conocido como «Jesuko».
Testigos del ataque relatan que los sicarios realizaron al menos siete disparos, provocando pánico entre los asistentes. Algunos se lanzaron al suelo buscando protección, mientras que otros huyeron despavoridos de la escena. En medio de la balacera, un agente de seguridad, encargado de custodiar el evento, resultó gravemente herido al sufrir una fractura en la pierna izquierda mientras intentaba escapar de los disparos. El herido fue trasladado de inmediato al hospital Honorio Delgado Espinoza por serenos de Paucarpata.
Las autoridades, encabezadas por la Fiscal Provincial Rosaluz Aguilar Ramírez de la Segunda Fiscalía Provincial Penal Corporativa de Paucarpata, iniciaron las investigaciones en el lugar de los hechos. La policía logró recuperar siete casquillos de bala, evidencia que será clave para esclarecer el ataque. Sin embargo, el silencio impera entre los asistentes, quienes, temerosos de posibles represalias, se han mostrado renuentes a colaborar con las autoridades.
Este ataque pone en evidencia la creciente inseguridad en Paucarpata, un distrito conocido por sus frecuentes fiestas chichas, donde la falta de control por parte del alcalde Marco Antonio Anco ha generado un clima de vulnerabilidad. La comunidad exige respuestas y acciones concretas para frenar la ola de violencia que sigue cobrando víctimas inocentes.
