Una joven de 25 años denunció el robo de su billetera dentro de un bus de transporte público mientras se dirigía a su vivienda en el Cercado. Al llegar a casa y darse cuenta del hurto, revisó sus cuentas y se llevó una desagradable sorpresa: los delincuentes habían realizado varias compras utilizando sus tarjetas bancarias del Scotiabank e Interbank.
La víctima relató que, tras descubrir el robo, inmediatamente verificó sus estados de cuenta y se encontró con una serie de transacciones fraudulentas. «Cuando llegué a mi casa me percaté del hurto, por lo que procedí a revisar mis cuentas y me doy con la sorpresa que estaba endeudada», comentó.
Las autoridades revisan las transacciones realizadas con las tarjetas sustraídas para rastrear a los responsables del delito. Este episodio pone de relieve la creciente preocupación por la seguridad de los usuarios del transporte público y la necesidad de medidas más eficaces para prevenir el robo de pertenencias y el uso indebido de tarjetas bancarias.
