La ciudad de Arequipa enfrenta una escalada alarmante de inseguridad, con sujetos a bordo de motos lineales perpetrando ataques violentos y empleando armas de fuego para amedrentar a la población. El pasado sábado, cuatro personas denunciaron ser víctimas de esta peligrosa modalidad delictiva conocida como «falso delivery».
El primer incidente ocurrió alrededor de las 3 de la madrugada en la intersección de la calle Topacios con San Fernando (Cercado). Dos amigos, de 19 y 17 años, fueron abordados por un individuo en moto con una caja de Rappi, simulando ser un repartidor. Bajo la apariencia de pedir indicaciones, el falso delivery descendió de la moto y, amenazándolos con una pistola, exigió la entrega de celulares y dinero. Tras el asalto, el delincuente logró huir con los teléfonos de ambos jóvenes.
Cerca de las 19 horas del mismo sábado, un grupo de amigos esperaba la iluminación de un parque en la intersección de las calles Tacna y Huarza (Alto Selva Alegre). Dos individuos en moto los interceptaron, apuntándoles con pistolas. Ante el intento de fuga de Diego H.M. (23), fue brutalmente agredido con la cacha de la pistola en la cabeza. Los delincuentes, luego de golpearlo en el suelo, se llevaron las pertenencias de Diego y otro joven. La víctima tuvo que ser trasladada al hospital Goyeneche debido a la gravedad de las lesiones y el abundante sangrado.
El General PNP Colin Sim Galvan, jefe de la Región Policial, ha reiterado que la Policía tiene la autorización para intervenir a los individuos que se transportan en motocicletas. La comunidad espera con urgencia medidas efectivas para contrarrestar esta creciente amenaza y restaurar la seguridad en las calles de Arequipa.
