El majestuoso nevado Coropuna, un testigo silencioso del paso del tiempo y uno de los glaciares más imponentes de la región, enfrenta una alarmante y acelerada desaparición. Un retroceso del 47% en su masa glaciar en los últimos años, revelado por estudios recientes, ha encendido las alarmas y movilizado a la comunidad. Sin embargo, esta crisis va más allá de la pérdida de hielo; se trata de un desafío que amenaza con cambiar el destino de más de 60,000 personas que dependen del Coropuna para su subsistencia.
Ante esta situación, el Comité Técnico Coropuna 2030, conformado por los alcaldes de Castilla, Condesuyos, La Unión, y la Consejera Natividad Taco Cueva, se ha erigido como una respuesta proactiva, pero la pregunta que subyace es: ¿será suficiente?
Durante una reciente visita técnica al nevado, encabezada por Taco Cueva y los alcaldes Henry Lerena (Andaray), Rafael Portilla (Viraco) y Ronald Isaac Corahua (Pampacolca), se constató lo que ya era evidente en los informes: la situación es crítica. La pérdida anual de 4,000 m² de glaciar no es solo una cifra; es un recordatorio tangible de los impactos del cambio climático y de las actividades humanas en la región.
El Comité ha comenzado a plantear soluciones, desde la construcción de cochas para la recolección de agua hasta la reforestación con plantas nativas, en un esfuerzo por mitigar el daño. Sin embargo, la complejidad del problema va más allá de la ingeniería y la biología; implica un cambio en la forma en que la sociedad percibe y valora estos ecosistemas. Taco Cueva lo dejó claro al señalar que la deglaciación no solo compromete la seguridad hídrica, sino que también pone en riesgo la educación, la agricultura y el desarrollo sostenible de la región.
Además, el Comité ha solicitado el apoyo de las gerencias de Energía y Minas y de Medio Ambiente del Gobierno Regional para frenar las actividades mineras en el área, un factor adicional que agrava la situación del Coropuna. La consejera Taco Cueva ha enfatizado la necesidad de declarar estas zonas como intangibles, buscando así una protección más robusta que asegure la supervivencia del nevado y, por ende, de las comunidades aledañas.
Jaime Soto Linguani, gerente de Desarrollo Económico y turismo de la Municipalidad Provincial de Condesuyos, acudió como representante del distrito Chuquibamba, mencionando los atractivos que nacen al pie del nevado Coropuna como lo son: el bosque de queñua, pesca de truchas en el rio arma, las más de 15 mil cabezas de ganado de camelidos sudamericanos que se crían y pastean en las diferentes comunidades campesinas de Condesuyos