Tras tres días de arduas labores, el Centro de Operaciones de Emergencia Regional (COER Arequipa) confirmó la extinción total del incendio forestal registrado en el sector de Miraflores, distrito de Chiguata. El siniestro fue controlado a las 11:23 de la mañana del 6 de octubre, luego de intensas acciones de mitigación que se desarrollaron desde el pasado sábado, en una zona de difícil acceso y con condiciones climáticas que complicaron las labores del personal de respuesta.
Según la Oficina de Gestión del Riesgo de Desastres de la Municipalidad Distrital de Chiguata, el fuego afectó aproximadamente 50 hectáreas de cobertura vegetal, principalmente pastos naturales y matorrales. Pese a la magnitud del incendio, las autoridades no reportaron pérdidas humanas ni afectaciones a la salud de las personas, aunque sí se registraron daños en ecosistemas locales y fauna silvestre de la zona.
En las tareas de control participaron de manera articulada personal del COER Arequipa, la Gerencia Regional de Gestión del Riesgo de Desastres, serenazgo distrital, efectivos del Ejército del Perú, el Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas (SERNANP), la Policía Nacional, trabajadores municipales y pobladores del sector, quienes unieron esfuerzos para frenar el avance del fuego. La coordinación entre instituciones permitió contener las llamas que amenazaban con extenderse hacia áreas agrícolas y viviendas cercanas.
Actualmente, el responsable de la Oficina de Gestión del Riesgo de Desastres de Chiguata realiza la Evaluación de Daños y Análisis de Necesidades (EDAN), con el fin de determinar el impacto total del siniestro y las medidas necesarias para la rehabilitación del área afectada. En paralelo, el COER Arequipa continúa con el seguimiento y la consolidación de la información, además de brindar asistencia técnica y coordinación interinstitucional para garantizar una recuperación segura y sostenible del territorio.
El Gobierno Regional de Arequipa destacó el compromiso y la rápida respuesta de las entidades que participaron en la emergencia, así como la colaboración de los comuneros que se sumaron voluntariamente a las labores de extinción. Finalmente, reiteró su llamado a la población a evitar las quemas de pastos y residuos agrícolas, prácticas que continúan siendo una de las principales causas de los incendios forestales en la región y que ponen en riesgo el ecosistema, la agricultura y la seguridad de las comunidades rurales.


